farmacognosis

Cultivos oleaginosos: aceites, mantequillas y ceras.

Los medicamentos a base de aceite no deben confundirse con el aceite esencial, ya que los medicamentos a base de aceite se conocen como aceites fijos, mantequillas y ceras.

El aceite fijo y la mantequilla son principalmente mezclas glicéricas, donde los ácidos grasos tienen una cantidad de carbones casi siempre iguales (de 16 a 22) y un grado diferente de saturación; en particular, las mantequillas tienen una menor concentración de ácidos grasos insaturados.

Las ceras son mezclas de ácidos grasos esterificados con alcoholes distintos del glicerol y en estas mezclas es más probable encontrar ácidos grasos con un número impar de átomos de carbono.

La porción minoritaria de los medicamentos oleaginosos (de uno a diez por ciento máximo) se compone de una amplia gama de compuestos lipofílicos: fitoesteroles (esteroides vegetales), polifenoles, terpenoides, funciones vitamínicas, flavonoides, precursores de esteroides (como el escualeno) ), y los hidrocarburos simples. Esta fracción no glicerídica, llamada fracción insaponificable, caracteriza al fármaco desde el punto de vista funcional y diferencia entre ellos los aceites, las mantequillas y las ceras. En otras palabras, las propiedades de salud de los diferentes medicamentos oleaginosos están dictadas por la naturaleza química prevaleciente en su fracción insaponificable. En cualquier caso, todos los fármacos oleaginosos tienen propiedades emolientes para uso tópico, ya que su naturaleza lipofílica es similar a la matriz lipídica de la piel y favorece su relajación. El uso interno de dichos medicamentos se limita a los aceites fijos, que en este caso muestran propiedades laxantes y lubricantes. La importancia funcional de los fármacos oleaginosos está relacionada principalmente con su uso tópico.