salud del páncreas

pancreatina

La pancreatina es una mezcla de enzimas producidas por el páncreas, esenciales para una correcta digestión de los macronutrientes.

Entre los fermentos pancreáticos más conocidos recordamos las amilasas para la digestión de carbohidratos, lipasas para la digestión de lípidos, tripsina y quimotripsina para la digestión de proteínas.

Bajo la influencia de ciertos estímulos fisiológicos, las enzimas pancreáticas se vierten en la parte inicial del intestino delgado, llamada duodeno, donde se completa la digestión y comienza el proceso de absorción.

Como resultado, es evidente que una ausencia o un déficit de enzimas pancreáticas compromete la eficacia digestiva, causando una serie de trastornos intestinales desagradables debido a la falta de absorción (esteatorrea, diarrea, flatulencia, etc.). En todas estas condiciones, la pancreatina demuestra ser una ayuda preciosa para el paciente.

Las píldoras o cápsulas están recubiertas con sustancias resistentes al ácido gástrico, que se activan en el duodeno, justo donde la pancreatina es necesaria para completar los procesos digestivos. Este resultado se obtiene gracias a las envolturas sensibles a los ácidos, que se funden solo a un pH superior a 5, 5. Para no interferir con estos mecanismos, es importante tragar las pastillas sin masticarlas, junto con las comidas o en los momentos inmediatamente anteriores o posteriores, de acuerdo con las instrucciones de su médico o farmacéutico.

La pancreatina se administra en todas aquellas patologías que producen una secreción pancreática insuficiente, típica de la pancreatectomía (extirpación quirúrgica total o parcial del páncreas), pancreatitis, fibrosis quística y otros casos de insuficiencia funcional del páncreas exocrino.

La pancreatina es un fármaco bien tolerado; Cualquier efecto secundario generalmente afecta el sistema digestivo, con la aparición de diarrea o estreñimiento y malestar estomacal. En individuos predispuestos (contraindicados a los alérgicos a los productos de cerdo), la pancreatina puede causar reacciones alérgicas, con erupciones, picazón, disnea, opresión en el pecho e hinchazón de la lengua, la cara o los labios.