Por el Dr. Roberto Uliano
Beneficios para adultos y niños
Un artículo publicado en el Journal of American Dietetic Association confirma los datos de un estudio realizado hace unos años por el centro europeo de investigación de cáncer EPIC en Oxford ( Investigación prospectiva europea sobre el cáncer y la nutrición) : personas que siguen un estilo de comida vegetariana están menos expuestos a los riesgos de enfermedades de salud típicas del mundo occidental: niveles bajos de colesterol en la sangre, riesgo reducido de enfermedades del corazón, niveles reducidos de presión arterial, menor riesgo de diabetes tipo II y menor riesgo de contraer cáncer, en particular el intestino .
Italia ocupa el primer lugar en Europa por el número de vegetarianos, con más de 6 millones de personas, el 10% de la población, dividida en diferentes tipos según su estilo de comida. Los que adoptan una dieta vegetariana tienen diferentes motivaciones: moral, de salud, filosófica, religiosa. De hecho, los vegetarianos menos estrictos no comen carne ni pescado, sino que aceptan leche y huevos, mientras que los veganos también los excluyen. A medio camino están los ovo-vegetarianos que excluyen la leche, pero no los huevos.
El fuerte aumento en la población vegetariana también se debe al apoyo científico, que indica cómo esta dieta, si es bien equilibrada y variada, no presenta ningún peligro concreto de deficiencias nutricionales y es apropiada para cada ciclo de vida.
¿Cómo comportarse con los niños?
¿Es correcto y apropiado someterlos a este tipo de nutrición para su crecimiento?
Es indudable que los niños veganos están más expuestos a las deficiencias de calcio, hierro y vitamina B12 después de la exclusión de todos los productos animales; Además, los estudios estadísticos indican que los niños veganos, aunque en la norma, crecen a un ritmo menor que los niños omnívoros, y luego se equiparan durante la adolescencia.
¡En estos casos, sería aconsejable planificar la nutrición con un nutricionista que indique las modalidades para evitar precisamente retrasos en el crecimiento o la desnutrición generados a veces también por un mal manejo de la alimentación! Por lo tanto, sin apartarse a favor o en contra de la dieta vegetariana, ponga como prioridad la ingesta correcta de proteínas, carbohidratos, vitaminas y oligoelementos necesarios para el óptimo desarrollo psicofísico del niño, ¡quien decidirá qué poner en el plato solo!