salud del sistema nervioso

Encefalopatía hipertensiva: ¿cómo curarla?

Un tipo de encefalopatía generalmente temporal, o reversible si se cura a tiempo y de manera correcta, es la llamada encefalopatía hipertensiva .

Esta enfermedad neurológica particular se define con el adjetivo hipertensivo, ya que se debe a una condición mórbida grave, conocida como hipertensión maligna, que causa un aumento repentino y alto de la presión arterial .

Tras varios estados patológicos capaces de aumentar repentinamente la presión de las arterias (entre ellas recordamos nefritis aguda, eclampsia, hipertensión arterial esencial, feocromocitoma, etc.), la encefalopatía hipertensiva requiere principalmente tratamiento hipotensor (o antihipertensivo ).

Hipotenso, o antihipertensivo, significa: "que tiene el propósito de reducir la presión arterial".

Recordando que en caso de hipertensión maligna, la presión arterial diastólica (o mínima) excede los valores de 130-140 mmHg, el objetivo inicial de la terapia hipotensiva debe ser reducir la presión diastólica de las arterias en un máximo del 25%, luego llevarla a un valor entre 100 y 105 mmHg (NB: el valor normal es entre 60 y 90 mmHg).

La razón por la cual la reducción no debe superar inicialmente el 25% es muy simple: una caída repentina en los niveles de presión arterial diastólica puede dañar las arteriolas cerebrales y reducir la perfusión de la sangre al cerebro.

El tratamiento hipotensor inicial se realiza mediante la administración intravenosa de fármacos antihipertensivos, ya que la vía intravenosa garantiza una acción terapéutica más rápida.

Una vez que se logra el objetivo mencionado, comienza la segunda fase de la terapia, que consiste en reducir la presión diastólica de 100-105 mmHg a un valor normal .

Esto se logra con la administración de antihipertensivos orales, es decir, tomados por vía oral.

Si con las administraciones intravenosas el resultado deseado se obtiene ya después de 2 a 6 horas, con la administración oral no se alcanza antes de los 2 o 3 meses .

DROGAS UTILIZADAS

Para reducir la hipertensión maligna de acuerdo con las indicaciones anteriores, los medicamentos antihipertensivos que se administran habitualmente son:

  • nicardipina
  • labetalol
  • nitroglicerina
  • Nitroprusiato de sodio
  • clevidipina
  • fenoldopan

Todos los fármacos hipotensores que pueden tener efectos secundarios cerebrales, como clonidina, reserpina y metildopa, están totalmente desaconsejados .

SEGUIMIENTO

Tan pronto como comienza la terapia, es importante controlar el progreso de la presión diastólica paso a paso . Esto tiene el propósito de evitar que se produzcan reducciones exageradas de los niveles de presión, reducciones exageradas que, como ya se mencionó, pueden ser muy peligrosas.