salud del bebe

Cistitis en niños

generalidad

La cistitis en los niños es un trastorno inflamatorio que puede ocurrir tanto en niños muy pequeños como en niños en edad escolar. Este trastorno se caracteriza por una inflamación de la pared de la vejiga, generalmente debido a una infección bacteriana.

El principal golpe responsable de la aparición de cistitis en los niños es Escherichia coli . De hecho, este microorganismo es la causa de infecciones del tracto urinario en más del 75% de los casos. Sin embargo, la cistitis también puede ser causada por otros microorganismos gramnegativos (como Klebsiella pneumoniae ) o por bacterias grampositivas, como algunos tipos de estreptococos y estafilococos.

epidemiología

La cistitis, y más generalmente las infecciones del tracto urinario, pueden afectar tanto a bebés como a niños pequeños y en edad escolar.

Como en el caso de los adultos, incluso en pacientes pediátricos, la incidencia de cistitis parece ser mayor en las mujeres que en los hombres, especialmente en la edad de cuatro años.

causas

Como se mencionó, la cistitis es un trastorno inflamatorio causado por una infección bacteriana, sostenida en la mayoría de los casos por bacterias Gram-negativas (como E. coli, K. Pneumoniae, etc.), pero que a veces también puede ser apoyada por bacterias Gram -positores (como estafilococos y estreptococos).

Las causas capaces de desencadenar la infección bacteriana mencionada pueden ser de origen y naturaleza diferentes, y pueden contribuir entre sí en la etiología de este trastorno. Entre estos, mencionamos:

  • Anormalidades en la funcionalidad del tracto urinario;
  • Malformaciones y cambios en la estructura del tracto urinario, incluyendo los riñones;
  • Presencia de reflujo vesicouretral;
  • diabetes;
  • Obstrucciones del tracto urinario;
  • Uso de catéteres vesicales;
  • Reducción de las defensas inmunitarias;
  • Mala higiene íntima;
  • Uso de detergentes demasiado agresivos.

Síntomas y complicaciones

Los síntomas de la cistitis en los niños pueden variar mucho dependiendo de la edad del paciente.

En bebés y niños pequeños, la cistitis puede manifestarse con signos y síntomas más bien generales, como irritabilidad, pérdida de apetito, vómitos, letargo y fiebre aparentemente inexplicable.

Por otro lado, en los niños mayores de dos años, la cistitis generalmente tiene síntomas muy similares a los de los adolescentes y pacientes adultos. Entre estos síntomas, recordamos:

  • Aumentar el número de micciones durante el día (pollachiuria);
  • Dificultad para orinar;
  • hematuria;
  • piuria;
  • Retención urinaria;
  • Dolor y / o ardor al orinar;
  • Tenesmo de la vejiga;
  • Orina turbia y maloliente;
  • Enuresis nocturna (si el niño ya usa el baño).

Sin embargo, a veces puede ocurrir que la cistitis en los niños sea asintomática y que se diagnostique accidentalmente durante los exámenes de rutina normales.

Sin embargo, si no se diagnostica rápidamente y / o si no se trata adecuadamente, la infección que causó la cistitis podría expandirse y llegar al tracto genital y al tracto urinario superior. En este último caso hablamos de pielonefritis.

Por lo tanto, en el caso de que el niño presente alguno de los síntomas mencionados anteriormente, es esencial que se ponga en contacto de inmediato con su pediatra o su médico.

diagnóstico

El diagnóstico de la cistitis en los niños generalmente se realiza a través del análisis de los síntomas (que, si los niños son muy pequeños, serán descritos por los padres al médico) y mediante el análisis de la orina.

La muestra de orina debe tomarse de la manera adecuada y luego se someterá a pruebas específicas, destinadas a determinar la contaminación bacteriana desde un punto de vista cuantitativo (para verificar la presencia real de una infección) y desde un punto de vista cualitativo (con el fin de implementar la estrategia terapéutica más adecuada para erradicar los microorganismos responsables de la infección).

Terapia farmacológica

Por lo general, la cistitis en los niños es un trastorno que se resuelve con facilidad y bastante rápido al seguir la terapia correcta.

Debido a que este trastorno es causado por una infección bacteriana, su tratamiento consiste en la administración de antibióticos.

Los ingredientes activos más utilizados para el tratamiento de la cistitis en niños son las penicilinas, como la amoxicilina (Zimox®) y la ampicilina (Amplital®), y las cefalosporinas, como la cefixima (Cefixoeal®).

Por lo general, se prefiere usar estos medicamentos por vía oral, pero si esto no es posible, el médico puede considerar administrar el medicamento por vía parenteral.

La dosis de antibiótico que se administrará para el tratamiento de la cistitis en niños varía según el peso corporal y la edad del paciente. Por lo tanto, el médico determinará, de forma estrictamente individual, tanto la dosis exacta del medicamento como el tipo de antibiótico que cada niño deberá tomar.

En caso de que el niño también tenga fiebre alta, el médico puede decidir administrar medicamentos antipiréticos como el paracetamol (Tachipirina®).

Finalmente, en los casos más graves, el médico puede considerar necesario hospitalizar al niño, en el que se realizarán todos los exámenes apropiados y se establecerán las terapias farmacológicas más adecuadas.

prevención

En la mayoría de los casos, la prevención puede ser suficiente para prevenir la aparición de cistitis en los niños. De hecho, siguiendo indicaciones simples y comunes, uno puede obstaculizar fácilmente el desarrollo de la infección bacteriana responsable de este trastorno molesto.

En este sentido, generalmente recomendamos:

  • Cambie el pañal con frecuencia para evitar la propagación y la proliferación de bacterias que podrían ser responsables de la aparición de la cistitis;
  • Educar a los niños sobre la higiene personal adecuada;
  • Durante la ejecución de la higiene íntima diaria del niño, evite usar detergentes demasiado agresivos;
  • Educar a los niños para que no mantengan la orina demasiado tiempo;
  • En los niños que ya no usan pañales, evite usar ropa interior hecha de fibras sintéticas y prefiera ropa interior de algodón.