síntomas

Dificultad de concentración - Causas y síntomas

definición

La atención es una función psíquica que orienta y enfoca la actividad mental consciente en ciertos estímulos, elementos o aspectos de una situación particular. La capacidad de atención es extremadamente variable y depende de las condiciones ambientales, el estado de ánimo, el grado de estrés y la edad.

La dificultad para concentrarse es, por lo tanto, el resultado de fluctuaciones, desviaciones o alteraciones radicales de esta actividad mental y se produce especialmente cuando falta la motivación y el interés en objetos o sujetos precisos. Este síntoma reconoce múltiples causas y puede asociarse con una serie de otros trastornos, como la pérdida de memoria a corto plazo y la dificultad para desarrollar un concepto de forma clara, escuchar y formular palabras.

La dificultad de concentración puede ocurrir en caso de anemia por deficiencia de hierro y diversas enfermedades neurológicas (como la enfermedad de Alzheimer). Además, es uno de los síntomas psíquicos de la depresión y los trastornos de ansiedad. En algunos casos, depende de la falta de sueño o estrés.

La intoxicación aguda por alcohol reduce la capacidad de concentración, al igual que el alcoholismo crónico y el consumo de drogas (por ejemplo, heroína y cocaína) dan como resultado un daño cerebral permanente que compromete las actividades cognitivas. La dificultad de la concentración también puede representar el efecto secundario de ciertos medicamentos, como los ansiolíticos.

En el niño, los problemas de concentración pueden ocurrir en presencia de parasitosis intestinal; En este caso, también suelen aparecer inquietudes, trastornos del sueño, palidez y enuresis.

Además, en la edad pediátrica, la incapacidad para prestar atención es uno de los síntomas del TDAH (trastorno por déficit de atención e hiperactividad) y se asocia con hiperexcitabilidad, agresión excesiva, comportamiento impulsivo e impetuoso y falta de disciplina.

Posibles causas * de dificultad de concentración

  • Acidosis metabólica
  • Adenoides hipertróficas
  • alcoholismo
  • Alergias respiratorias
  • anemia
  • Anorexia nerviosa
  • ansiedad
  • Apnea nocturna
  • autismo
  • Beber en exceso
  • Cetoacidosis diabetica
  • La cinetosis
  • cisticercosis
  • Demencia vascular
  • Depresión mayor
  • Depresión posparto
  • dislexia
  • dispraxia
  • La distimia
  • Trastorno bipolar
  • Trastorno citotóxico
  • Trastorno de estrés postraumático
  • Encefalitis transmitida por garrapatas (TBE)
  • Encefalopatía de wernicke
  • Hepatitis fulminante
  • Intolerancia alimentaria
  • Hipogonadismo masculino
  • Jet lag
  • La legionelosis
  • Enfermedad de Creutzfeldt-Jakob
  • Enfermedad de Huntington
  • Enfermedad de Lyme
  • Enfermedad de Wilson
  • menopausia
  • mielofibrosis
  • Enfermedad de Alzheimer
  • Enfermedad de cushing
  • La narcolepsia
  • Parálisis cerebral infantil
  • Psicosis de Korsakoff
  • Rinitis alérgica
  • esquizofrenia
  • sífilis
  • Trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH)
  • Síndrome de fatiga crónica
  • Síndrome de las piernas sin descanso.
  • Sindrome de asperger
  • Síndrome de down
  • Síndrome de Klinefelter
  • Síndrome de Prader-Willi
  • Sindrome de reye
  • Síndrome de Tourette
  • Sindrome de turner
  • Síndrome fetoalcohólico
  • Síndrome de fibromialgia
  • Sindrome premenstrual
  • Tripanosomiasis africana