herboristería

Fitoterapia: terapia de plantas medicinales.

¿Qué es la fitoterapia?

El término "fitoterapia" deriva del griego "phytòn", que significa "planta", pero al mismo tiempo también "criatura": es curioso cómo este doble significado esconde un concepto profundo. De hecho, la raíz deriva del verbo "phyto" (generar y ser generado), que indica el proceso de fertilidad, de la creación: podemos ver un claro paralelismo que une una planta con el ser, es decir, con el hombre y con la vida.

La fitoterapia en la historia.

Esta premisa es necesaria para comprender cómo se ha interpretado la fitoterapia, en el curso de la historia, como la terapia de plantas medicinales, explotada para uso farmacológico.

Ya en la Edad Media, las plantas se usaban en el tratamiento de muchos trastornos y para aliviar los sufrimientos de los enfermos.

En un momento dado, las moléculas sintéticas actuales no existían (la mayoría de ellas se derivaban de moléculas naturales): para cuidarlas utilizaban las plantas y explotaban los dones que la naturaleza ofrecía al hombre, como las hierbas medicinales cultivadas y espontáneas. Aunque no conocíamos las razones científicas de la eficacia, nuestros ancestros también practicaban la medicina herbal, aunque de una manera simplista en comparación con la actual. Los remedios naturales se transmitieron de generación en generación, lo que representa una gran experiencia para mantener el cuerpo sano. Es comprensible que la terapia de las plantas medicinales fuera adecuada para aliviar los males menores, mientras que para las patologías más graves solo quedaban la fe, la oración o la resignación.

Fitoterapia hoy

Si la medicina natural en general, y la fitoterapia en particular, han sido abandonadas por un período corto, coincidiendo con el "boom" de la medicina moderna convencional, en los últimos años se ha registrado el fenómeno contrario: los efectos secundarios causados ​​por La síntesis renovó el interés por el enfoque "natural". Por lo tanto, una buena parte de la población ha registrado mayor atención y una marcada conciencia de la fitoterapia.

La fitoterapia es la ciencia médica que estudia el uso correcto de las plantas medicinales y sus derivados, con el fin de tratar o prevenir diversas enfermedades y afecciones de interés puramente médicas (medicamentos) o de salud (suplementos).

Para definir la naturaleza y el tratamiento de las enfermedades, la medicina herbolaria moderna se refiere a los mismos principios de la medicina convencional basados ​​en la evidencia de eficacia, pero utilizando solo recursos de origen vegetal. Según la OMS, "los productos medicinales acabados con una etiqueta, que contienen ingredientes activos solo de plantas o asociaciones de plantas en estado bruto, en forma de preparaciones, también incluyen jugos, gomas, fracciones de lípidos, aceites sustancias esenciales y todas las demás sustancias de este tipo ". A menudo, estas fitomedicinas son para todos los efectos de medicamentos de origen vegetal, porque están diseñadas para realizar una acción terapéutica. Su efecto depende de la naturaleza y la concentración de los constituyentes químicos farmacológicamente activos: aunque para cada fuente vegetal los ingredientes activos característicos se han identificado de manera aproximada, a la cual se le atribuye cierta acción terapéutica, existen otras minas extraordinarias de sustancias complementarias en la fuente vegetal que contribuyen a modular la acción (ver concepto de fitocomplejo).

Al igual que las drogas sintéticas, los remedios herbales se toman en cantidades ponderales, acordes con el peso corporal y no muy diluidos, como es el caso de los remedios homeopáticos. Sin embargo, uno nunca debe olvidar un concepto muy importante: la fitoterapia no debe entenderse como una verdadera "medicina que cura el mal", sino como un remedio para aliviar el trastorno o un dispositivo para mantener la salud del cuerpo y el espíritu.

aplicaciones

La fitoterapia puede encontrar una aplicación importante para el uso de medicamentos convencionales: es una buena regla, sin embargo, siempre siga las recomendaciones del médico para evitar las consecuencias desagradables de la interferencia. Como ejemplo, nunca debe tomar hypericum ( Hypericum Perforatum ) con otros medicamentos, ya que podría modular la absorción de los medicamentos que se toman. Esta es la razón por la cual la fitoterapia también es responsabilidad del médico, así como del herbolario. La competencia y la responsabilidad son dos cualidades esenciales para un médico, incluso en el campo fitoterapéutico, porque a veces es el propio médico quien depende de la vida y la salud de las personas.

Para que el concepto sea aún más claro, se debe enfatizar que la droga sintética, el protagonista de la medicina convencional, a menudo se limita a tratar los síntomas sin actuar sobre las causas; la hierba, una figura prominente en el paisaje fitoterapéutico, y la medicina alternativa en general, se fijaron el objetivo de aliviar la causa subyacente del trastorno, cuidando al individuo en su totalidad y su salud en 360 grados (importancia de un correcto estilo de comida y vida, meditación, actividad física, etc.). Probablemente, es precisamente por esta razón que el hombre del tercer milenio se ha acercado más a la fitoterapia y a las medicinas complementarias o no convencionales, para erradicar la perturbación de sus cimientos.

La automedicación

El redescubrimiento de la fitoterapia, en las últimas dos décadas, ha llevado a los académicos a analizar con más ojo crítico y cuidadoso las plantas medicinales: a pesar de que los remedios herbales existen desde los albores de la vida, en algunos casos aún no se ha alcanzado una certeza científica. Eso justifica los efectos terapéuticos demostrados por el uso empírico y por la tradición popular. Muchas personas eligen la automedicación con hierbas a partir de las supuestas propiedades terapéuticas: al hacerlo, cometen el error de basarse en ideas personales, filosóficas e ideas sin base científica, que como tales no conducen a ningún resultado concreto, si no A veces hasta el empeoramiento de la situación preexistente.

Por lo tanto, el uso de la fitoterapia en apoyo de la medicina convencional es correcto, pero siempre bajo el consejo de una persona competente y experta, ya que incluso las plantas pueden ocultar efectos secundarios no deseados.