alergias

idiosincrasia

generalidad

La idiosincrasia es una condición de hipersensibilidad, o de reactividad anormal, hacia diferentes sustancias (alimentos, drogas, contaminantes ambientales, etc.) a los cuales el organismo muestra intolerancia. Este estado no se induce, ni se acompaña de fenómenos inmunológicos, como ocurre, por ejemplo, en el caso de la alergia.

La idiosincrasia reconoce una predisposición genética y puede derivar de las alteraciones (constitucionales) propias del paciente. Algunas de estas reacciones se deben a un fenómeno de susceptibilidad a un antígeno que se había expuesto previamente, debido a una intolerancia o una respuesta normal pero anormal. En otros momentos, la idiosincrasia está relacionada con una anomalía enzimática, que altera el metabolismo de la sustancia en cuestión. En un cierto número de casos, entonces, la hipersensibilidad es congénita, primaria y no atribuible a ningún mecanismo conocido.

Independientemente de la causa, las reacciones idiosincrásicas se producen con imágenes clínicas de varios tipos (urticaria, rinitis, náuseas, diarrea, dificultad para respirar, etc.), que a veces son letales.

La terapia más utilizada para el tratamiento de esta reacción patológica se basa en la administración de fármacos antagonistas específicos.

¿Qué?

La idiosincrasia es una predisposición particular del cuerpo a reaccionar de manera anormal, excesiva y / o violenta, cuando entra en contacto con un medicamento o ciertas sustancias, incluso si es inofensivo. Para ser claros, las reacciones idiosincrásicas son diferentes de las debidas a una sobredosis o a los efectos secundarios de los medicamentos, que ocurren con cierta regularidad.

Idiosincrasia y reacción alérgica: ¿qué diferencias?

Aunque esta reacción suele ser negativa, la idiosincrasia no debe confundirse con un fenómeno alérgico.

La diferencia sustancial entre las dos manifestaciones es que la alergia es una reacción del sistema inmunitario a algo que en algunos sujetos se reconoce como un extraño, por lo que se ataca.

Sin embargo, la idiosincrasia no es atribuible al sistema inmunitario, pero puede depender de diversos mecanismos patógenos (como alteraciones congénitas del patrimonio enzimático, cambios en el equilibrio farmacocinético y farmacodinámico, etc.).

causas

La idiosincrasia es una reactividad patológica específica del organismo a ciertas sustancias que, en sujetos normales, son prácticamente inofensivas. El fenómeno puede derivar de factores genéticos o de alteraciones constitucionales, por lo tanto típicas del paciente.

Entre los mecanismos más frecuentemente implicados en las reacciones idiosincrásicas se encuentran:

  • Sensibilidad excesiva a sustancias inalteradas y / o sus metabolitos (como en el caso, por ejemplo, de un medicamento);
  • Falta / presencia en el organismo del sujeto de enzimas particulares, como el G6PD o el glutatión, que impiden la asimilación de la sustancia o reaccionan al contacto con ella.

reacción de drogas idiosincrásica

La medicinaidiosincrasia es una reactividad anormal del cuerpo a medicamentos sólidos, líquidos o gaseosos, normalmente bien tolerados por la gran mayoría de los individuos. A diferencia de las reacciones alérgicas, las manifestaciones idiosincrásicas varían según el medicamento tomado, pueden surgir desde la primera administración y son dosis dependientes.

Factores de riesgo

La idiosincrasia se encuentra con mayor incidencia en mujeres, en comparación con los hombres.

Los síntomas

La idiosincrasia se manifiesta con una reactividad anormal y exagerada, por lo que ante el simple contacto con ciertas sustancias o la administración de medicamentos a dosis terapéuticas, los sujetos predispuestos muestran síntomas tóxicos o crisis caracterizados por:

  • Malestar general
  • Náuseas y vómitos;
  • palidez;
  • Caída de la presión arterial;
  • Dificultad respiratoria
  • Manifestaciones cutáneas generalizadas (urticaria).

Tratamiento y prevención.

En primer lugar, para controlar las reacciones idiosincrásicas, es necesario conocer la sustancia a la que uno es vulnerable y las posibles reacciones asociadas con ella, para intervenir rápidamente desde el punto de vista terapéutico. Por lo tanto, los factores desencadenantes deben eliminarse y evitar nuevos contactos.

Si es necesario dejar de tomar un medicamento, es necesario considerar cambiar a una clase farmacológica diferente.