salud del sistema nervioso

Encefalopatía de Wernicke: la cura

Un tipo de encefalopatía generalmente temporal, o reversible si se cura a tiempo y de manera correcta, es la llamada encefalopatía de Wernicke o enfermedad de Wernicke .

Esta enfermedad neurológica en particular, que debe su nombre a un neurólogo alemán llamado Carl Wernicke, surge debido al agotamiento de la vitamina B1 (o tiamina), presente en el cuerpo.

Las principales situaciones que pueden causar una grave privación de vitamina B1 en el cuerpo y que pueden causar indirectamente la encefalopatía de Wernicke son el alcoholismo grave, la desnutrición y la cirugía bariátrica .

En las tres circunstancias, hay una absorción (o malabsorción) reducida de nutrientes fundamentales, incluida la tiamina.

Particularmente marcado por tres síntomas ( oftalmoplejía, ataxia y confusión mental), la encefalopatía de Wernicke es una patología que puede retroceder con buenos resultados y con la rapidez suficiente, siempre que se diagnostique y se trate a tiempo .

El primer paso y el más importante en el proceso terapéutico es restaurar las reservas de tiamina. Para lograr esto, los médicos prescriben de 2 a 3 administraciones al día de la mencionada vitamina del grupo B.

La vía de administración puede ser intravenosa o intramuscular (vías parenterales).

Ambos métodos son seguros y efectivos, aunque debe recordarse que una dosis excesiva de tiamina, inyectada por vía parenteral, puede provocar reacciones anafilácticas.

Las etapas terapéuticas posteriores varían según las causas que desencadenan la encefalopatía.

De hecho, un alcohólico debe dejar de beber y asociarse con inyecciones de tiamina adecuadas a las inyecciones de glucosa, mientras que una persona desnutrida debe alimentarse de acuerdo con las necesidades del cuerpo humano .

OTROS TRATAMIENTOS

Debido a que algunos pacientes experimentan edema en varias partes del cuerpo (en particular, el edema de papila), también se pueden prescribir medicamentos antiinflamatorios .

Además, si se comprueba la escasez de otros alimentos (que es muy probable entre quienes no se alimentan adecuadamente), pueden ser necesarios suplementos externos de magnesio, cobalamina (vitamina B12), ácido ascórbico, ácido fólico, nicotinamida (vitamina B3) y zinc., fósforo y taurina (este último está indicado sobre todo en presencia de trastornos cardiocirculatorios).