psicología

Agorafobia: ¿Qué es? Causas y síntomas y terapia por G. Bertelli

generalidad

La agorafobia es un trastorno de ansiedad desencadenado por espacios abiertos o lugares muy concurridos.

Desde el punto de vista clínico, el sujeto que sufre se ve asaltado por una sensación de angustia, gran incomodidad, cuando se encuentra en situaciones desconocidas, capaz de dar la impresión de no tener rutas de escape fáciles y donde nadie podría ayudar. . En la mayoría de los casos, la agorafobia es un problema que surge de manera secundaria a la aparición de ataques de pánico, ansiedad menor y estrés postraumático .

La severidad de la agorafobia y los comportamientos adoptados para evitar las situaciones temidas pueden variar ampliamente de una persona a otra. En los casos más graves, además de la ansiedad, pueden aparecer síntomas físicos o ataques de pánico en toda regla, con sudor frío o acentuado, aumento de la frecuencia cardíaca (taquicardia), náuseas y asfixia.

Al igual que otras fobias, la agorafobia puede tener repercusiones negativas en la vida cotidiana de una persona, en términos de limitaciones en la vida social y laboral. Afortunadamente, este trastorno puede abordarse a través de un camino de psicoterapia, dirigido a superar la fobia.

¿Qué

Agorafobia: definición

La agorafobia es el miedo a los espacios y lugares abiertos, de los cuales puede ser difícil o embarazoso escapar.

Por lo tanto, el sujeto que sufre de este trastorno:

  • Tiene dificultad para salir de la casa, si no está acompañado;
  • Sentirse incómodo viajando solo en transporte público (como el autobús o el avión);
  • Trate de evitar los lugares públicos muy populares (por ejemplo, restaurantes, mercados, conciertos, cines y centros comerciales).

Además de estar acompañadas de manifestaciones ansiosas de entidad variable, la agorafobia a menudo involucra síntomas somáticos como: sudoración, escalofríos o sofocos, latidos rápidos del corazón, náuseas, sensación de falta de oxígeno y miedo a morir.

Como consecuencia, la persona que sufre de agorafobia trata de no exponerse al estímulo fóbico y termina adoptando estrategias de evitación o buscando la presencia continua y tranquilizadora de un miembro de la familia.

La agorafobia es un trastorno que puede ser muy incapacitante, porque los que sufren a menudo:

  • Depende completamente de la casa;
  • Se ve obligado a abandonar la casa solo cuando está acompañado.

¿Sabías que ...

"Agorafobia" deriva etimológicamente del griego "agorà", que significa "piazza" y "phóbos", es decir "miedo" o "fobia", por lo tanto, literalmente significa "miedo a la plaza".

Causas y factores de riesgo

¿Cuáles son las causas fundamentales de la agorafobia?

La agorafobia es un trastorno en el cual el estímulo fóbico está representado por la idea de estar rodeado y privado de libertad espacial a su alrededor.

Las causas aún no se conocen completamente. En la mayoría de los casos, sin embargo, este trastorno parece ser el resultado de una experiencia traumática experimentada durante la infancia y la adolescencia: si se desalienta el instinto natural de explorar, se genera un bloqueo que también afecta la percepción de uno mismo y de uno mismo. posibilidad. En la edad adulta, esta reacción puede ser enfatizada por una baja autoestima.

Síntomas y complicaciones

Agorafobia: ¿Cómo es Manifesta?

La agorafobia es una condición muy compleja, que no se trata solo del miedo a los espacios abiertos, grandes y anchos, o en la multitud . De hecho, el temor de estar en situaciones particularmente estresantes o de las que es imposible escapar o recibir ayuda en caso de peligro puede desencadenar los síntomas de este trastorno fóbico.

Por lo tanto, una persona que sufre de agorafobia puede tener miedo de situaciones específicas, tales como:

  • Estar en un espacio abierto y amplio (supermercado, parking o puente);
  • Salir de casa, si no está acompañado;
  • Espera en la fila o estar en la multitud;
  • Viajar en transporte público (por ejemplo: trenes, autobuses o aviones);
  • Visita a un centro comercial;
  • Asistir a lugares públicos concurridos (por ejemplo, restaurantes, mercados, conciertos, cines y centros comerciales).

También hay casos en los que el malestar percibido está relacionado con el miedo a situaciones generales, como delitos, accidentes y enfermedades.

¿Cuáles son los síntomas de la agorafobia?

Claramente, los síntomas y la gravedad de la agorafobia pueden variar de un caso a otro:

  • Algunas personas experimentan una leve ansiedad o malestar solo cuando se encuentran en entornos desconocidos.
  • Otros agorafóbicos, por otro lado, muestran una seria sensación de angustia y, en casos extremos, ataques de pánico en toda regla.

Al igual que otros trastornos fóbicos, la agorafobia también puede causar reacciones fisiológicas, como:

  • Latidos acelerados;
  • Escalofríos y piel de gallina;
  • Sudor frío o, por el contrario, sofocos;
  • Hormigueo y picazón;
  • Náuseas y / o vómitos;
  • Sensación de desmayo o mareo;
  • Dolor de cabeza
  • Confusión y sentimiento de "cabeza vacía";
  • Dificultad para respirar (falta de aliento, sensación de asfixia);
  • Alteraciones visuales, como fatiga ocular, esguinces o ilusiones ópticas;
  • Silbidos en los oídos;
  • Boca seca
  • temblores;
  • lamentos;
  • adormecimiento;
  • Urgencia urgente
  • Sentido de opresión o dolor en el pecho.

Algunas personas reportan tener la percepción de ser asfixiantes. Otros intentan salir y / o alejarse de la situación agorafóbica por cualquier medio posible. En casos severos, la agorafobia puede causar miedo a desmayarse, perder el control o incluso morir .

Agorafobia: nota a los síntomas somáticos

Los síntomas físicos manifestados en la agorafobia, así como en otras fobias, señalan la aparición de una respuesta emocional anormal : el cuerpo está respondiendo al estímulo fóbico con una expresión extrema de la reacción fisiológica de " lucha o huida ". En otras palabras, la mente interpreta el pensamiento de que los espacios abiertos o abarrotados son una amenaza para un peligro potencial, por lo que automáticamente prepara al cuerpo para luchar por sobrevivir. Esta excesiva respuesta emocional es uno de los signos más claros de que una persona es víctima de un trastorno fóbico.

Posibles consecuencias de la agorafobia

Como se anticipó brevemente, la agorafobia puede limitar enormemente la vida de quienes la padecen. En los casos severos, los síntomas del trastorno fóbico se activan solo por pensar en las situaciones que típicamente generan miedo.

En la mayoría de los casos, la agorafobia puede desencadenar ataques de pánico ante la idea de:

  • No recibir asistencia pública, en caso de crisis de ansiedad.
  • Estar en un lugar sin una salida de emergencia inmediata, disponible para ver, lo que le permite ir a un lugar reputado más seguro (esta última se considera una de las características clave de las situaciones agorafóbicas).

La agorafobia también puede llevar a recurrir a varias soluciones como, por ejemplo, no acudir a grupos especialmente concurridos o evitar viajar en autobús o avión. La ansiedad relacionada con el trastorno fóbico también es responsable de un estado de estrés persistentemente alto que, a largo plazo, puede ser perjudicial para la salud .

Agorafobia: trastornos asociados.

La agorafobia puede estar asociada con la depresión y el comportamiento obsesivo . El trastorno puede relacionarse, entonces, con los trastornos de ansiedad y otras fobias, como las sociales, la oscuridad, las alturas y los viajes aéreos.

¿Sabías que ...

La agorafobia se considera generalmente como la antítesis de la claustrofobia .

Profundizar: Claustrofobia - Definición, Características y Terapia »

diagnóstico

La agorafobia puede ser un trastorno altamente incapacitante, ya que puede influir en múltiples actividades y contextos de la vida cotidiana. Por esta razón, si los síntomas limitan significativamente la vida normal de todos los días y están presentes durante más de seis meses, es recomendable consultar a un médico, un psiquiatra o un psicólogo. En algunos casos, el diagnóstico de agorafobia puede surgir durante una consulta con el paciente por otro problema de ansiedad.

Agorafobia: ¿cómo se establece el diagnóstico?

La evaluación inicial de la agorafobia es esencial para comprender las razones detrás de la incomodidad, identificando su significado y cuantificando su alcance.

Por lo tanto, el médico:

  • Le pide al paciente una descripción de los síntomas y qué los desencadena;
  • Trate de determinar qué tan graves son los síntomas;
  • Excluye otros tipos de trastornos de ansiedad o patología general.

Según el Manual diagnóstico y estadístico de trastornos mentales (DSM), la agorafobia se define según algunos criterios:

  • El miedo es irrazonable, excesivo, persistente y causado por la presencia de una situación específica o implica una ansiedad anticipada con respecto a ella;
  • En caso de exposición al estímulo, se provoca una respuesta de ansiedad: en los adultos, esto puede tener los rasgos de un ataque de pánico repentino;
  • Los adultos reconocen que su miedo es desmotivado y desproporcionado a la amenaza o peligro percibido;
  • Se adoptan medidas y estrategias de evitación para evitar incurrir en la situación temida, así como mostrar una tendencia a enfrentar nuevas experiencias con un cierto sentido de angustia;
  • La reacción anxiogénica, la anticipación o la evitación de la persona interfieren con la vida y las relaciones diarias o causan un malestar significativo.

Además, para formular el diagnóstico, la agorafobia ha persistido durante algún tiempo (generalmente 6 meses o más) e involucra síntomas que no pueden atribuirse a otra condición mental, como el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) o el trastorno. estrés postraumático (TEPT).

Tratamiento y remedios.

Agorafobia: ¿cómo puedes hacer frente y superar?

La agorafobia se puede tratar con diferentes opciones terapéuticas, también en combinación entre sí. La elección depende de la persona y la severidad del cuadro clínico. Las intervenciones más efectivas incluyen técnicas de relajación, meditación y psicoterapia cognitivo-conductual dirigidas a superar el miedo a los espacios abiertos.

Estas intervenciones tienen el objetivo de inducir al paciente a racionalizar su miedo mórbido, tratar de concentrarse en la posibilidad de reaccionar a los pensamientos que provocan ansiedad y enfrentar las convicciones negativas asociadas con la agorafobia.

drogas

En combinación con el tratamiento psicológico, el psiquiatra puede prescribir un tratamiento farmacológico para controlar los síntomas asociados con el trastorno fóbico, como la ansiedad.

Los medicamentos que suelen estar indicados son las benzodiacepinas, los betabloqueadores, los antidepresivos tricíclicos, los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) y los inhibidores de la monoaminooxidasa (IMAO).

Se debe enfatizar que el uso de medicamentos puede calmar el problema temporalmente, pero no lo resuelve permanentemente.

Terapia de exposición y desensibilización

Un enfoque eficaz para tratar la agorafobia es la presentación de estímulos fóbicos al paciente en condiciones controladas, hasta obtener una desensibilización sistémica .

La terapia implica la exposición gradual y repetida a lo largo del tiempo a la situación que él considera agorafóbica, para aprender cómo manejar la ansiedad y enfrentar las ideas negativas asociadas con el miedo a espacios abiertos, lugares desconocidos y sin una salida de emergencia inmediata.

Terapia cognitivo-conductual

La desensibilización puede practicarse en combinación con técnicas cognitivas y conductuales, con el fin de modificar el círculo vicioso de la agorafobia y trabajar en el significado de los estímulos fóbicos para el paciente.

De esta manera, el sujeto agorafóbico está expuesto a las situaciones temidas, con la posibilidad de aprender técnicas de autocontrol emocional, que le permiten reducir su miedo.

Para más información: Psicoterapia cognitiva conductual: ¿qué es? Que necesitas »

Tecnicas de relajacion

Para hacer frente a la agorafobia con eficacia, la psicoterapia se puede practicar junto con técnicas de relajación, como el entrenamiento autógeno, ejercicios de respiración y yoga. Estos tratamientos pueden ayudar a controlar la ansiedad relacionada con la situación que considera agorafóbica.

Otro enfoque que puede ser útil para algunas personas es la hipnosis . Este tratamiento alternativo proporciona un estado de relajación que hace que la persona en cuestión reconozca las causas de sus temores y los supere.