Curada por Roberto Rillo - Autor del libro: Calistenia Culturismo
Fuente de CLARENCE BASS: www.cbass.com
En Italia, muy pocos conocen a Clarence Bass, pero en los Estados Unidos es una especie de leyenda viviente. Fue uno de los primeros en obtener porcentajes de grasa corporal por debajo del 4%. Esta característica le ha ganado el apodo de "rasgado" (sin piel).
Clarence Bass, después de un año de una dieta particular, logró alcanzar un peso corporal de 70 kg, consistente en 67 kg de masa magra y solo 3 kg de masa grasa equivalente a un porcentaje de grasa corporal de 4.16%. Estaba muy satisfecho con el resultado obtenido, pero no estaba satisfecho con el nivel muscular. Luego consultó con un médico y decidió probar los esteroides anabólicos (deca durabolin y anavar). La deca durabolin se tomó con una inyección por semana, la primera de 100 mg y la otra de 50 mg. En cambio, el anavar se tomó en tabletas tres veces al día en las comidas principales. Los datos iniciales del cuerpo fueron los mencionados anteriormente. Al final, Bass se encontró con un peso corporal de 75 kg, una masa magra de 70 kg y una masa grasa de 5 kg, equivalente a un porcentaje de grasa corporal del 6, 6%. Estaba satisfecho con las ganancias pero tenía que definirse más. Decidió optimizar sus ganancias concentrándose en el entrenamiento y la dieta, pero sin esteroides, a pesar de todo el esfuerzo que puso en el entrenamiento y el cuidado para seguir una dieta estricta, se encontró con un peso corporal de 77 kg, una masa magra de 70 ¡kg y una masa grasa de 7 kg, igual a un porcentaje de grasa corporal del 9%! Fue tal consternación que literalmente dice "Quería encontrar un agujero negro y tirarlo" y desde ese momento decidió que ya no recurriría a los esteroides.
Esta es la experiencia de Clarence Bass que ocurrió en 1978; fue y es similar a la de miles de otros constructores de cuerpo. El resultado y los efectos narrados son típicos. El organismo produce naturalmente testosterona, si se introduce artificialmente en grandes cantidades, los testículos que deberían producirla se encogen y se atrofian. Después del ciclo de esteroides, el cuerpo se encuentra con reinicio de testosterona: desde el exterior ya no sale, desde el interior no se producen los testículos, el resultado es que el organismo se convierte en un eunuco que pierde músculo rápidamente y gana grasa.
Muchos gurús, campeones y practicantes del dopaje se reirán de esta experiencia considerándola infantil y argumentarán que a través de una dosis a escala y la inserción al final de otras sustancias capaces de combatir la atrofia de los testículos, puede obtener ganancias musculares duraderas y calidad.
Pero los hechos dicen que, en cambio, se adopta cualquier estrategia, al final, el problema se menciona solo y, en lugar de resolverlo, se vuelve crónico y muy serio. No piense que será diferente para usted: los efectos positivos de los esteroides anabólicos son los mismos para todos, así como los efectos negativos. Excepto que los efectos negativos duran más que los positivos y, a veces, duran para siempre.
Medite.