salud del corazon

Sintomas mixoma

definición

El mixoma cardíaco es un tumor benigno.

Esta enfermedad se origina a partir de la transformación de las células del corazón (el proceso neoplásico es, por lo tanto, primitivo) y representa el 50% de todos los tumores que pueden afectar este órgano.

La causa aún no está clara, pero probablemente los mixoms se originan a partir de células mesenquimales indiferenciadas presentes en el músculo cardíaco.

Los mixomas aparecen predominantemente en la aurícula izquierda, pero también pueden aparecer en otras cavidades del corazón (en la aurícula derecha y, rara vez, en los ventrículos), y se desarrollan como un tumor solitario o, con menos frecuencia, en forma multifocal.

El mixoma se presenta como una masa redondeada, muy vascularizada, con una consistencia sólida o gelatinosa, que también puede alcanzar un tamaño discreto (4-8 cm de diámetro). La superficie de este tumor puede ser: lisa, compacta y lobular, o friable e irregular.

Por lo general, los tumores de la aurícula izquierda se originan en el endocardio, en el borde de la fosa oval (área en el tabique que separa las dos aurículas) y son sólidos; en aproximadamente el 75% de los casos, estas masas están pedunculadas y pueden prolapso a través del orificio de la válvula mitral, lo que impide el llenado ventricular durante la diástole. Con menos frecuencia, los mixomas son sésiles, por lo que se unen a través de su propio pedúnculo con una gran base de implantación.

Síntomas y signos más comunes *

  • anemia
  • anorexia
  • arritmia
  • ascitis
  • astenia
  • Aumento de la ESR
  • escalofríos
  • caquexia
  • cardiomegalia
  • palpitaciones
  • Tobillos hinchados
  • disfagia
  • disnea
  • Distensión de las venas del cuello.
  • Dedos del palillo
  • Dolor de pecho
  • Dolores en las articulaciones
  • Dolores musculares
  • edema
  • hemoptisis
  • fiebre
  • Piernas hinchadas
  • hipotensión
  • ortopnea
  • palidez
  • Perdida de peso
  • petequias
  • trombocitopenia
  • Muñeca paradójica
  • Retención de agua
  • Sindrome de raynaud
  • Soplo cardiaco
  • modorra
  • Sudores nocturnos
  • desmayo
  • taquicardia
  • Taponamiento cardiaco
  • tos
  • Derrame pericárdico
  • mareo

Direcciones adicionales

La presentación clínica de los mixoms es variable: los síntomas pueden aparecer constantemente o aparecer repentinamente, especialmente en relación con la suposición de posiciones corporales particulares. En particular, se pueden observar síntomas constitucionales, obstrucción del flujo sanguíneo en las válvulas cardíacas y fenómenos embólicos.

El mixoma cardíaco puede provocar dolor en el pecho, dificultad para respirar, tos irritante, edema periférico y fatiga fácil. Los síntomas constitucionales también incluyen fiebre, somnolencia, artralgia, debilidad muscular, dificultad para tragar y pérdida general de peso, pérdida de peso y palidez de la piel. Además, se produce anemia (a menudo hemolítica), fenómeno de Raynaud y dedos de baqueta (hippocratismo digital).

Los síntomas mecánicos (p. Ej., Disnea y toracoalgia) se derivan de la compresión de las cámaras cardíacas o coronarias, y de la irritación o el taponamiento causados ​​por el crecimiento o la hemorragia del mixoma en el pericardio.

Los mixomas irregulares y friables aumentan el riesgo de una embolia sistémica; Los fragmentos o el material trombótico pueden desprenderse de las masas neoplásicas presentes en el corazón derecho o izquierdo, alcanzando respectivamente los pulmones u órganos periféricos (como el cerebro, las coronarias, las extremidades, los riñones y el bazo).

La interferencia con la función valvular puede, sin embargo, causar edema pulmonar, insuficiencia respiratoria y signos de estenosis mitral. Los mixomas también pueden causar arritmias. La imagen puede complicarse con insuficiencia cardíaca, insuficiencia valvular y enfermedad arterial coronaria.

La presencia de un mixoma cardíaco se confirma mediante un examen ecocardiográfico, técnicas de imagen (angiocardiografía, radiografía de tórax, tomografía computarizada y resonancia magnética) y tipificación de tejidos mediante biopsia endomiocárdica y cateterización cardíaca.

El tratamiento de los tumores cardíacos benignos implica la resección quirúrgica. Este enfoque suele ser decisivo, pero después de la cirugía, el paciente debe someterse a ecocardiogramas regulares para controlar cualquier recaída.