antropometría

Bio-Impedancia

Editado por: Luca Giovanni Bottoni

Los momentos en que la confiabilidad fue dada a la escala doméstica, una herramienta que se basa en medir el peso global de lo que sea que dependa, sin tener en cuenta los diferentes aspectos del cuerpo humano como su "factor fundamental de composición para un Evaluación de un estado físico ". Hasta la fecha, todos los métodos para determinar la composición corporal que pueden realizarse in vivo son indirectos. Esto significa que todos estos métodos proporcionan estimaciones, aunque sean precisas, no medidas directas.

El BIA (Bioimpedentiometría) es un examen bioeléctrico para el análisis cuantitativo y cualitativo de la composición corporal. La medición de la resistencia y la reactancia que se encuentra con una corriente débil que atraviesa el cuerpo humano nos permite establecer, gracias a las fórmulas adecuadas, un esquema de interpretación inmediata sobre el estado de hidratación y nutrición del sujeto. En ausencia de alteraciones hidroeléctricas, las correlaciones entre los distintos compartimentos del cuerpo son constantes e interdependientes, para permitir una evaluación cuantitativa con alta precisión. La resistencia medida y los valores bioeléctricos de la reactancia se dividen por la altura del sujeto para obtener la conductividad con el fin de transformar las propiedades eléctricas de los tejidos en una clínica determinada.

No todos saben que una de las primeras aplicaciones del análisis de impedancia bioeléctrica fue con propósitos militares: en la segunda mitad de los años 70, el profesor Jan Nyboer junto con dos estudiantes de la época, Rudy J. Lietdke y Tony Talluri, analizaron la Cambios en la hidratación llevados por pilotos de altura. Tras la experiencia adquirida, se produjo el primer analizador de impedancia para fines comerciales: el sensor del sistema BIA 101 Akern RJL.