Hay casos en los que los ojos pueden parecer bizcos, pero solo debido a las conformaciones particulares de la cara. En este caso hablamos de pseudoestrabismo .
La falsa percepción de un estrabismo se encuentra a menudo en los recién nacidos, especialmente en el caso de un parto prematuro. De hecho, los bebés recién nacidos pueden tener un puente nasal aplanado y ancho y un pliegue de la piel que tiende a cubrir el ángulo interno del ojo (epicanto), dando así la impresión de que los ojos están desviados. Sin embargo, estos son rasgos faciales que tienden a desaparecer con el crecimiento.
El pseudoestrabismo también se observa en ciertos grupos étnicos. Los ojos orientales, por ejemplo, se caracterizan por la presencia de pliegues epicánticos, por lo que pueden dar la impresión de ser bizcos.
