fisiología

mucosa

La mucosa, también llamada membrana mucosa o mucosa, es una estructura en capas que cubre la superficie interna de las cavidades de los órganos y los canales que se comunican con el exterior. Entre los numerosos ejemplos de órganos huecos que se comunican con el entorno externo, recordamos los del sistema digestivo, urogenital, auditivo y respiratorio.

La función de las membranas mucosas es cubrir y proteger las superficies subyacentes, mientras se realizan actividades de absorción y / o secreto.

La naturaleza de las células que forman las membranas mucosas refleja su especialización, que siempre tiene que ver con la interacción entre el entorno externo e interno (intercambio de gases, excreción, absorción, digestión, secreción, etc.).

En la imagen de al lado, por ejemplo, podemos ver cómo en la mucosa intestinal se extrae el epitelio, formando estructuras llamadas vellosidades intestinales, cubiertas por células epiteliales absorbentes; Estas células, a su vez, tienen en la superficie una estructura llamada banda en forma de cepillo, formada por numerosas expansiones, las microvilis, que cumplen la importante función de aumentar la superficie absorbente del epitelio.

Si tomamos la mucosa respiratoria, en cambio, notamos la presencia de un epilelo ciliado y mucosecretente pseudoestratificado (a veces de múltiples capas). La presencia de moco, junto con la acción de las pestañas, facilita el atrapamiento de microorganismos, polvo y partículas extrañas, favoreciendo al mismo tiempo la eliminación hacia el exterior.

Las membranas mucosas consisten en tres láminas superpuestas, de grosor variable dependiendo de las áreas del cuerpo examinadas. Estas capas se denominan epitelio (lámina epitelial), membrana basal y lámina propia. Algunas membranas mucosas, como las del sistema digestivo, tienen una cuarta lámina, la mucosa muscular, que consiste en una capa delgada de fibras musculares lisas, que las separa de la túnica subyacente.

La lámina superficial está formada por tejido de revestimiento epitelial (pisos simples o de múltiples capas, etc. según las características consideradas y su función). La lámina basal consiste en una capa continua de muco-polisacárido, reforzada por fibras de colágeno reticulares. La lámina propia, por otro lado, contiene tejido conectivo fibrilar con funciones de apoyo; en su grosor, además, se pueden encontrar glándulas, células linfoides y redes nerviosas finas, sanguíneas y linfáticas.

La mayoría de las membranas mucosas contienen glándulas que secretan moco. Esta sustancia fibrosa y viscosa, más o menos densa, protege y lubrica las propias membranas y se secreta en mayores cantidades durante los procesos inflamatorios locales.