El olor de la orina de un sujeto sano y bien hidratado es normalmente "sui generis" y, como tal, carece de malas fragancias. De hecho, estamos hablando de un líquido normalmente aséptico, que contiene concentraciones variables de sustancias de desecho que dependen de la dieta, el estado de salud y la hidratación, y la ingesta de posibles medicamentos.

Por lo tanto, un mal olor a orina puede ser un signo de afecciones patológicas, pero no necesariamente.

Comida y olor a orina.

Algunos alimentos de consumo normal pueden alterar, a veces de una manera muy desagradable, el olor de la orina. Los espárragos (que también cambian su color, moviéndolos hacia el verde), la coliflor y el ajo suelen ir acompañados de una orina maloliente.

Otras causas del olor a orina.

Los cambios en el olor de la orina son generalmente temporales y no siempre son un signo de afecciones patológicas. Entre las innumerables causas responsables de estas alteraciones recordamos:

Deshidratación (debido a que los solutos responsables del mal olor aumentan su concentración, la orina adquiere un color particularmente oscuro y un aroma característico de amoniaco);

Cistitis, infecciones urinarias, pielonefritis (infecciones renales), uretritis, prostatitis y vaginitis (en este caso, el problema puede no estar relacionado con el tracto urinario, considerando la proximidad anatómica: para profundizar, ver: olor vaginal);

Insuficiencia hepática;

La cetoacidosis diabética y la cetonuria (también típicas del ayuno prolongado, se acompaña de abundante orina con un olor dulce, similar a la acetona);

Fístula rectovaginal;

Fenilcetonuria (enfermedad rara presente desde el nacimiento);

Tomar suplementos de vitamina B-6;

Trastornos metabólicos;

Enfermedad de la orina en jarabe de arce (raro);

Trimetilaminuria o olor a pescado (raro);

Incluso algunas drogas pueden alterar el olor de la orina; entre estos recordamos algunos antibióticos como la amoxicilina, ampicilina, nitrofurantoína, ciprofloxacina, norfloxacina, ofloxacina y trimetoprim.

Las causas del mal olor de la orina pueden investigarse mediante un simple análisis de orina y su cultivo (para buscar posibles infecciones bacterianas).