En los últimos años, hemos aprendido que el buen hábito de practicar actividad física regular y constante, acompañado de una dieta correcta y equilibrada, es la base de una vida saludable y de larga duración. De hecho, cada deporte tiene la característica de mejorar la condición física general, preservar el cuerpo y la mente de muchas enfermedades, y nos ayuda diariamente en la lucha contra el envejecimiento prematuro, la obesidad y todas sus complicaciones. Por medio de elecciones dirigidas y ponderadas en relación también con sus posibilidades psico-físicas, se puede diversificar la actividad optimizando el resultado final.